El lujo es personal ~ Arlette y Martine Syms


anonymous gallery & Relaciones Públicas, Ciudad de México, México.
Galería invitada Rose Easton (Londres) para Condo CDMX 2024
Fotos: cortesía Relaciones Públicas


El concepto de lujo lleva implícita la noción de rareza, singularidad, una extravagancia o una anormalidad. Muchas de las cosas que definimos como “lujosas” son, en el mejor de los casos, exclusivas y, en el peor, excluyentes.

La obra de la artista multidisciplinar mexicana Arlette, caracterizada por ser un alambique forjado al calor de gran artesanía, sutil ingenio y especificidad geográfica e histórica, es ciertamente lujosa, pero también profundamente personal.
La diversión y la excitación, en particular, irradian de lugares sorprendentes en sus esculturas, así como nos sorprenden en la vida real. Con esto en mente, tiene mucho sentido que para Luxury is personal [El lujo es personal]– una muestra colaborativa para Condo CDMX – una nueva pieza de Arlette se presente en conjunto con tres obras de Martine Syms, otra figura multidisciplinar cuya práctica artística combina teoría, memorias, cultura popular, política de género, sexo y un perverso sentido del humor.

Al igual que Arlette, puede que Syms forme parte del mundo artístico, pero su práctica se encuentra continuamente estimulada por el deseo de burlarse de lo absurdo y de la seriedad de éste. Syms es política y, a la vez, juguetona. En general, su obra tiene la vibra fresca, ruda, mitad genio o y mitad bromista, de una página de fans digital de una estrella del pop, sustentada por la academia moderna. Aquí, esa consideración elevada hacia el fanatismo y la feminidad toma forma literal: los tres collages de Syms en esta exposición, de los cuales uno se titula Luxury is personal, se mostraron por primera vez en una exposición de 2021 llamada Loot Sweets [Dulce de botín], que a su vez se originó con la visita de la artista a una subasta de trajes de la cantante Janet Jackson. Syms, asistiendo como fan, ganó una chaqueta de Alexander McQueen que había pertenecido a la cantante. La sensación de comunión psíquica que sintió con Jackson inspiró una serie de obras que exploraban la relación entre los objetos – artículos, objetos efímeros y ropa de diseñador, sí, pero también objetos de arte y objetos con relevancia cultural – y el yo.

La pieza complementaria de Arlette, Couch [Sillón], es de una magnitud y un peso sin precedentes en su práctica anterior: un sofá de bronce de 350kg reproducido a escala real – otro ejercicio de canonización de un objeto de significado personal o doméstico.
Al fin y al cabo, un sofá suele estar confinado en el hogar y diseñado para ser utilizado sin llamar mucho la atención. En este caso,se convierte en un monumento: un objeto legitimado por el trabajo manual y artesanal, el peso y el coste. (En su reverso aparece la impresión de la espalda musculosa de un hombre, lo que significa que también es una especie de himno monumental a la sensualidad y, más concretamente, al encanto de los hombres atractivos).

Al reconocer hasta qué punto nuestras propias historias individuales se componen de un collage de experiencias y adquisiciones, Syms también produce sus propios monumentos: a la excelencia negra, a la apreciación de las cosas bellas y al vertiginoso poder de la nostalgia. En Luxury is personal y más allá, las obras de ambas artistas transmutan con éxito lo singular y personal en algo más grande, sexy y grandioso – si no siempre literalmente en escala, al menos en significado.