Frágil Genealogía II

María José Argenzio, Ecuador.

Centro de Arte Contemporáneo de Quito (CAC), Quito, Ecuador – 2019
Curaduría: Eduardo Carrera R.
Fotos: cortesía de la artista

Luego de la participación de la artista ecuatoriana Maria José Argenzio en la XIV Bienal de Cuenca, presenta en CAC un conjunto de piezas que profundizan su trabajo sobre las relaciones y tensiones entre descendencia, raza y poder.
En “Frágil Genalogía II” examina las historias simbólicas y materiales de la identidad ecuatoriana mestiza en relación a su pasado colonial y al desarrollo moderno.

Desde la deconstrucción material y simbólica de objetos y elementos claves (como una peluca típica del colonialismo, los escudos de las familias elites, entre otros) Argenizio captura la relación entre la historia del pasado y la política del presente con una serie de definiciones acerca de identidades post-coloniales complejas. Por ende, su mérito es hacer evidente las dinámicas del poder y las diversas lógicas del pasado puestas en marcha para dar forma a las estructuras socio-culturales presentes.

En esta exposición, se presenta un nuevo proyecto, ‘Saltatrás o Tornatrás’. Una propuesta objetual y escultórica, que en lugar de enmarcar y perpetuar a un personaje, anula su función, para enfatizar en cambio la ostentación de su forma; el uso de técnicas artesanales, cuya fragilidad amenaza la integridad de la pieza, vuelve a aparecer en su más reciente producción artística. También se exhiben una serie de obras nunca antes expuestas en Quito, y otras piezas que son un referente dentro de la producción de la artista.

Texto de Eduardo Carrera R:

Frente a la genealogía de las instituciones museísticas que ha dado prevalencia a una visualidad blanca, masculina, heterosexual e históricamente racista, esta muestra pretende abrir un espacio de crítica a la construcción de las identidades post-coloniales y busca revelar, desde las prácticas artísticas, la pervivencia del orden colonial. Por ende, su mérito es hacer evidente las dinámicas del poder y las diversas lógicas del pasado puestas en marcha para dar forma a las estructuras socio-culturales presentes.

A través de sus trabajos, la artista María José Argenzio (Guayaquil, 1977) transmite sus reflexiones sobre las esferas política, social y económica en el Ecuador contemporáneo. Sus principales proyectos se han centrado en las tensiones que rodean a la identidad mestiza y a las clases sociales de herencia colonial. La exhibición Frágil Genealogía II, que se presenta en el CAC Quito, explora, justamente, las formas en que nuestras conexiones con el pasado se producen y se mantienen en constante tensión. El conjunto de obras se centra en las manifestaciones de blanqueamiento que dan forma a su materialidad y evocan el desgarramiento que provoca esa tradición.

En el trabajo de Argenzio, la identidad ecuatoriana está muy cargada de mitos e historicidades: lo simbólico y lo material se entrecruzan. Al proporcionar agencia a los materiales en sí, la artista los está considerando como un canal de comunicación, ya sea que estén expandiéndose en los medios y narrativas tradicionales o utilizando elementos que contienen una carga histórica y simbólica importante. Al explorar estas preocupaciones, la artista también plantea por qué decide trabajar con cierta materia en nuestra cultura y clima social actuales, y el papel que desempeñan estos materiales dentro de ella. El uso del oro y el dorado responde al maltrato producido por el consciente e inconsciente colonial en sus diferentes formas de exclusión, violencia y muerte.

Monedas, plantas, símbolos y materiales muestran un claro anclaje de la obra a su lugar de origen y sus significaciones propias. Pone en escena elementos naturales e intervenciones humanas por las cuales se puede reconocer al Ecuador. La relación con el oro en el caso de las obras de María José Argenzio demuestra la importancia del mismo para la economía del país en la época moderna, y su vinculación histórica con las poblaciones indígenas de los Andes. Al final, hace una clara referencia a lo que es el territorio ecuatoriano y a rasgos culturales que generan identificación entre su población.

Ecuador ha sido un país caracterizado por su construcción identitaria hispanista en tiempos modernos. Sus trabajos más recientes, ‘Con Nombres y Apellidos’ (2017), ‘Notabile y Nobicile’ (2017), ‘Genealogías’ (2015-2017), ‘Stoppages Étalon (versión económica) ’ (2015-2018), ‘Banderines’ (2015-2016) y ‘1.729’ (2011), son piezas que ofrecen una mirada crítica sobre las aspiraciones de las clases sociales altas y las oligarquías en el Ecuador. ‘Señora Principal’ (2018), hace referencia a los retratos que en los siglos XVII y XVIII adquirieron una importancia crucial. Dentro de una sociedad cada vez más dominada por la burguesía, las representaciones de individuos lujosamente vestidos al lado de símbolos de pujanza y de riqueza contribuyeron a la afirmación de su poder.
La obra es una serie de retratos que, en lugar de enmarcar y perpetuar a un personaje, insinúan su fragilidad. Por otro lado, ‘Chiquita’ (2013) y ‘1948 – 1965: ISI’ (2011) hacen explícito que el desarrollo moderno está construido con base en un pasado colonial; el relato y la identidad nacional se enfrentan a una crisis de representación simbólica. Finalmente, ‘25.000’ (2011), a 20 años de la dolarización en el Ecuador y de la pérdida del sucre, es una obra que nos recuerda un momento oscuro acerca de la historia económica del país.

Este bosquejo a lo largo de algunas obras en la exhibición, tiene como propósito establecer un contexto para hablar de la pieza ‘Saltatrás o Tornatrás’ (2019), comisionada por el CAC. Una propuesta objetual, que en lugar de inmortalzar a un personaje, anula su función, para enfatizar en cambio la ostentación de su forma; el uso de técnicas artesanales, cuya fragilidad amenaza la integridad de la pieza, vuelve a aparecer en su más reciente producción. La pieza actúa en contrasentido de aquello que se define como un marco de una pintura colonial de retrato. Los marcos de madera tallados y cubiertos de pan de oro generan un patrón a partir de su disposición, produciendo un efecto visual que sólo se puede observar en el conjunto. Su falta de función la convierte en un objeto extraño por sus cualidades materiales y en términos de su emplazamiento en la sala de exhibición. Saltatrás o Tornatrás define una relación problemática con la identidad mestiza, el título de la la pieza se refiere a que saltó o volvió atrás en orden a tener sangre blanca por tomar más de una persona de raza india o negra.

Frágil Genealogía II aborda la construcción colonial de las identidades y la imposición de un modelo de discriminación y racismo en América Latina. En este sentido, la muestra deja una puerta abierta a la reconstrucción de epistemologías críticas en relación al pasado colonial y al desarrollo moderno en la historia del Ecuador y evidencia que, hasta que los sujetos no sean capaces de lidiar con las barreras sociales y psicológicas para abordar las injusticias históricas, es probable que construyan y mantengan estructuras sociales, culturales y económicas excluyentes, racistas y violentas.