Visita por “Despertar el pulso” de Jimena Chávez Delion.

Jimena Chávez Delion, Perú.
Proyecto Amil, Lima, Perú.
Fotos: Juan Pablo Murrugarra. 

“Despertar el pulso” es una exhibición de Jimena Chávez Delion curada por Gisselle Giron en Proyecto Amil.
Esta propuesta, que combina esculturas, dibujos y un video documental, se inspira de las conversaciones que tuvo la artista con mujeres que trabajan pintando plantas de zapatillas falsas en la industria informal de calzado en las galerías del C.C. Perú al Futuro, ubicado en la zona comercial de Caquetá en Lima.
En esta publicación Jimena y Gisselle nos comparten sus experiencias, reflexiones y preguntas que activa este trabajo en particular.

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“Despertar el pulso lo inicié a principios del 2022 con un documental que luego incorporó otros medios y materialidades. Este film retrata, a través de testimonios, los diferentes sueños de un grupo de mujeres migrantes en sus entornos laborales. El proceso involucró 9 meses de entrevistas e investigación in situ en uno de los mercados de la zona comercial, seguido de más de un año de trabajo en el proyecto y planeamiento de la exposición con Gisselle. Fue al comienzo de la investigación (haciendo trabajo de campo) que decidí embarcarme en la realización de este documental.  Lo que definió el tema del documental fueron las conversaciones con las trabajadoras y el reconocimiento de la labor manual repetitiva, similar a mi quehacer artístico en el taller. Este sentimiento de reconocerse en otras voces ha ido desarrollándose durante todo el proceso de hacer el documental y también en el acompañamiento y planeamiento de la exposición con Gisselle.

Durante las primeras entrevistas, las conversaciones se centraron en la práctica del pintado, los materiales y la repetición, con los que me identifico en mi propio quehacer al trabajar mucho grabando sobre materiales, por ejemplo. Esto me llevó a preguntarles si alguna vez soñaban con su trabajo, ya que es algo que me ha pasado después de mucho trabajo. La respuesta afirmativa de las trabajadoras derivó en una serie de conversaciones y testimonios sobre soñar con las imágenes del trabajo, los puestos abarrotados de plantas de espuma, la falta de descanso y las demandas del día a día. Más adelante, conforme pasaba el tiempo y mi relación con ellas se consolidaba, me fueron confiando otros sueños más personales y aspiraciones, los cuales quise mostrar en el documental también.

La experiencia durante los meses de entrevistas y filmación me llevó a reflexionar sobre el cansancio y la carga mental femenina que nos persigue hasta en los sueños o nos impide recordarlos también. Pensaba mucho en la exigencia y sobreproducción del cuerpo y cómo evocarla a través de la materialidad que conforma los espacios de trabajo y en la precariedad de su infraestructura. Así fue como empecé a trabajar con textiles, mallas, tensiones y cabello sintético, y por otro lado, con esculturas de vidrio. Este último material lo utilicé para reproducir notas de pedidos que recolecté en los stands de pintado, las cuales estaban destinadas a ser botadas a la basura. Luego, este trabajo me llevó a buscar otras formas de hablar sobre el valor del trabajo manual invisibilizado, sobre la fragilidad y la precariedad donde surgen estos sueños.

A lo largo del tiempo, las conversaciones con ellas abarcaron desde compartir cosas cotidianas de nuestras vidas hasta experiencias de vida más profundas, como la migración y el deseo de regresar a casa. Esto último me conmovió mucho, ya que mientras filmaba, también me preparaba para emigrar. Más adelante, durante la edición y el proceso del proyecto, ya me encontraba en otro país, mudándome y experimentando muchos cambios, por lo que la edición fue un proceso muy personal también. Escuchar las voces y las entrevistas de ellas me fue guiando y acompañando, lo cual fue muy hermoso. A pesar de que las experiencias de vida de ellas y las mías son muy distintas, fue este reconocimiento en otras voces el que me guio y motivó durante el proceso de trabajo.

Radicada actualmente en Bruselas, Jimena acaba de ganar el Prix Sabam for Culture, en el marco del concurso Artconstet, donde participa de la exposición en el Museo de Le Botanique hasta el 4 de febrero.

Después de haber vivido periodos de tiempo en Perú y Bélgica por estudios y trabajo, me mudé este año permanentemente a Bruselas para encontrar una base fija aquí. Por lo tanto, este logro es muy importante para mí, no solo a nivel profesional, sino también a nivel personal, ya que marca el inicio de un nuevo periodo en mi vida, quehacer y un compromiso fuerte con otro contexto de trabajo donde quiero seguir desarrollándome. Este premio también incluye una exposición individual en un centro cultural de la ciudad, lo cual me emociona muchísimo, ya que será mi primera exposición individual en Bruselas. También me alienta mucho recibir este logro habiendo presentado el documental y algunas obras de Despertar el pulso, que es mi último proyecto y la experiencia más transformadora que he tenido como artista.” ~ Jimena Chávez Delion.