Inbound

Lucas Simões, Brasil.

Galería Pelaires, Palma de Mallorca, España – 2019
Fotos: Grimalt de Blanch, cortesía del artista.

El artista brasileño Lucas Simões presenta una serie de esculturas y piezas en España en la Galería Pelaires, donde la exploración del material tiene como objetivo llenar el soporte del objeto artístico de sentido.

Su formación como arquitecto, donde la técnica y la poética están interconectadas, contiene las claves para comprender su producción. Diversos formatos, técnicas y materiales, reflejan su investigación sobre la arquitectura brutalista y el fracaso de su sentido utópico.


Texto por Jesús Alcaide:

El entorno construido es una cosa, cómo la gente lo habita es otra. En “Construir y habitar. Ética para la ciudad” (2019), Richard Sennet, al igual que ya inició en ensayos fundamentales como “Carne y piedra” (1997), continúa investigando sobre los modos y maneras de relación del cuerpo y la ciudad, visibilizando todas aquellas cuestiones que la atraviesan como núcleo fundamental del desarrollo de la modernidad y de todas aquellas circunstancias que definen nuestro presente y sus condicionamientos socioeconómicos en la sociedad postcapitalista. My defences/becomes fences (Mis defensas /se convierten en barreras) escribía Mark Fisher a propósito del resentimiento en 2007 en uno de sus últimos textos del Reino Unido pre-brexit. No habrá lugar para las personas, escribía Clarice Lispector en 1974 sobre la ciudad de Brasilia. Dos contextos diferentes. Más de cuatro décadas los separan. Los mismos problemas. Construir, y habitar, o como relacionarnos con la ciudad y con nosotros mismos en un entorno de extrema complejidad.

En “Inbound. Travelling towards a particular place, especially when returning to the original point of departure”, el artista brasileño Lucas Simões construye en un trabajo específico para la Galería Pelaires, las preguntas y cuestiones que nacen sobre los modos y maneras en las que habitamos de una forma temporal un lugar con tantas particularidades como es una isla, espacio cuyo único límite y frontera es el mar, ese horizonte violento sobre el que como escribía Clarice Lispector acerca de Brasilia, se ha dibujado la ciudad.

Trazar límites, delimitar espacios, habitar lugares, construir experiencias. Partiendo de la noción del arquitecto y el urbanista como un dibujante del porvenir, y de la idea del dibujo (desenho/disegno) como aquello que aún no está construido (destino, trazo, riesgo) Lucas Simões continúa explorando en estos trabajos sobre lo que ya el crítico de arte brasileño Mário Pedrosa, uno de los grandes impulsores del arte moderno en Brasil, llamó “la naturaleza afectiva de la forma”.

Dentro de esa genealogía que conecta con algunos de los más importantes artistas de la modernidad concreta brasileña, el trabajo de Simões, tal y como ya pudimos ver en proyectos como Ressaca (2018) plantea de una manera poética, aunque crítica con algunas de las nociones de progreso a las que nos ha conducido la sociedad del bien(mal)estar, algunas de estas cuestiones que se trazan sobre los límites y las fronteras en el propio interior de nuestras ciudades.

Como una evolución de aquel trabajo surge “Inbound”, una instalación site-specific en la que un bosque de columnas y pilotes realizados con elementos de cerramiento y aislamiento (vallas, cercos, rejillas) se mezcla con el material del concreto (cemento/hormigón), para construir un nuevo hábitat, un lugar de experiencia temporal, una topología que es imposible definir como hogar. Puro tránsito. Un espacio para ser atravesado. Una visión sobre esa isla en la que, como escribía Chillida acerca de la escultura, “todo crece, vibra y encaja”.

En relación a esta instalación se han construido otros trabajos como “Chao” (Piso, estrato), una pieza de suelo en la que aborda la cuestión de los estratos, ese lugar firme sobre el que se va construyendo la vida y la experiencia. Lo móvil sobre lo firme, lo que cambia sobre lo que siempre permanece. La vida futura sobre el pasado que aún vive bajo nuestro pies.

La presencia del papel como ese lugar ficticio en el que se dibuja el porvenir y se trazan las construcciones futuras, vuelve a aparecer en el trabajo de Simões, pero a diferencia de contraponerlo al hormigón, tal y como ya había hecho en trabajos como “Abismos”, en esta ocasión son otros materiales los que construyen sus “relevo dissecado” (relieves disecados), piezas de pared en las que se ven claras referencias a la propia topografía, a la erosión, a los cortes en el terreno y una vez más a esos límites y fronteras que demarcan lo que ya no es de todos.

Inbound. El papel como el lugar en el que se traza el dibujo, el plano, el diseño, el pliegue. Inbound. El hormigón como la realidad construida de aquello que sólo fue una posibilidad.Inbound. La posibilidad de una isla. La posibilidad de una ciudad. Como escribe Sennet, la posibilidad de “cómo queremos vivir colectivamente”. La emergencia frente al aislamiento de una nueva colectividad.